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jueves, 30 de julio de 2015

Conducción política de equipos de trabajo


Hoy mientras volvía de trabajar de Azul recordaba lo siguiente en relación a los profesionales del ámbito de las ciencias humanas y el trabajo en el estado:

Que difícil que es conducir y evaluar las prácticas de los profesionales que trabajan esencialmente con lo abstracto de la subjetividad desde un equipo interdisciplinario, es decir, que trabajan con aquello que no es tan fácil de “ver” o “recortar” científicamente en los seres humanos.

Sean docentes, trabajadores sociales, psicólogos o acompañantes terapéuticos, todos tienen un doble desafío en el trabajo de dependencia: por un lado responder a una ética profesional, y por el otro, 
responder a una solicitud de trabajo de un “superior” o jefe. Y si ese trabajo de dependencia es en el ámbito gubernamental o en relación a este último como en una ONG, le debemos agregar a este estado de las cosas,  la dimensión política partidaria o de gobierno.

Estas preguntas y reflexiones no me son lejanas ya que alguna vez me ha tocado conducir equipos de profesionales y educadores, como así también lidiar con la tensión entre los objetivos políticos y los técnicos.

Ahora bien, pensemos en las opciones o estrategias que el conductor o “jefe” tiene frente a un equipo interdisciplinario, ya sea para evaluar las prácticas laborales e individuales de cada profesional, para evaluar el impacto del programa o institución en la comunidad desde su objetivo político, o simplemente para evaluar el funcionamiento institucional general. Ahora, también deberá pensar estratégicamente como incluirá ese equipo de profesionales de forma coherente con lineamientos políticos de un área, o con los lineamientos de las legislaciones que regulan las prácticas profesionales (la de niñez, la de salud mental, etc.).

Estrategias posibles del conductor:

  • 1.       Confiar plenamente, y de forma anticipada a la evaluación sistemática, que la capacidad de trabajo y la dirección político/ideológica de su equipo de trabajo REAL coinciden exactamente con lo que el mismo piensa, fantasea o proyecta.
  • 2.       Focalizarse solamente sobre el “hacer visible” y el cumplimiento de órdenes y horarios de trabajo. Este es el clásico ejemplo en donde lo importante es que un trabajador social haga muchas visitas y que un psicólogo al menos escuche a un pibe de vez en cuando (cuestiones que cualquier ser humano puede realizar sin ningún tipo de formación). No importa el “cómo” y el “para qué”, sino en “cuánto”. Es la aplicación de la lógica de la industria capitalista al campo profesional.
  • 3.       Hace hincapié solo sobre el factor emocional/orgánico. Es decir, el típico caso en el cual el empleado “si tiene buena onda conmigo que soy el jefe está todo bien y seguro que trabaja impecable”, como así también, su contrapartida: “si no me cae bien, seguro que trabaja muy mal”. En esta dimensión también se juega el factor narcisista del jefe, es decir, la situación en donde el empleado presenta propuestas o proyectos para mejorar o crear “algo” que al jefe no se le había ocurrido antes, y que este último vivencia muy neuróticamente como un señalamiento adrede de su propia falta, en vez de una invitación a la construcción de un saber colectivo. De esta última situación, a menudo, se desprende la famosa “rivalidad especular”, o duelo, de ver quién es el más apto, cuestión que muchas veces desconcierta hasta al propio empleado.
  • 4.       “Ojos que no ven corazón que no siente”, dice el dicho, y refiere a la estrategia por la cual el jefe simplemente pide el no enterarse de ningún conflicto o desequilibrio, sin interesarle mucho que se hace y que no se hace, y mucho menos el cómo.
  • 5.       El jefe que tiene mucha condición de liderazgo o militancia y que sabe que es fundamental contagiar en sus empleados con una misma idea-fin, o una ideología a seguir, o un objetivo que sea compartido por todos,  y que por sus características individuales de conductor puede hacerlo, pero descuidando la formación y capacidad técnica profesional de su personal.
  • 6.       La estrategia del funcionario “proveedor”. Es aquella por la cual, el jefe o referente cree o siente que su rol empieza y termina solo en brindar las condiciones materiales para ese equipo funcione. Sean edilicias, sueldos, herramientas o insumos para talleres.
  • 7.       Y por último, la estrategia que implica formarse mínimamente y de forma general en relación a las distintas disciplinas de su equipo interdisciplinario, para poder entender tanto el recorte de su “objeto” de intervención, su “encuadre” de trabajo, y como piensa cada uno su “campo” de acción (nótese que objeto, encuadre y campo son conceptos importantes referidos a la formación y praxis de todo profesional de las ciencias humanas). Dicho conocimiento es necesario para hacer “encajar” correctamente ese equipo dentro de una estrategia más global, institucional y política.

Tal vez haya otras posibles, pero creo que estas han sido las más recurrentes en mis experiencias laborales, y en las de otras personas con las que he dialogado.

Ahora bien, se darán cuenta que ninguna de las estrategias es si misma puede ser efectiva de forma sistemática y seria en la conducción y evaluación de un grupo de trabajo profesional e interdisciplinario en ciencias humanas. Sin embargo, es lo que uno se encuentra a diario en el quehacer laboral y sobre todo en el ámbito público. No obstante, no decimos que pensar y ejecutar una estrategia de conducción y evaluación superadora a las ya listadas, sea tarea fácil, pero si necesaria sí que es que queremos generar un dinamismo de avance orgánico, institucional y coherente ideológicamente.

Lo que estamos diciendo es sencillo: la ausencia o mala conducción es responsabilidad plena del que tiene la responsabilidad orgánica para conducir. Es decir, el jefe.

A menudo claro, es más fácil poner la falta en el empleado/técnico ya que se encuentra en una posición a-simétrica de ejercicio de poder con el jefe o líder, que establecer una autocritica o revisión por parte de este último. Dicha tarea implicaría una verdadera construcción colectiva entre ambos roles. Tampoco creemos que el horizontalismo sea una solución válida, ni que promueva institucionalidad orgánica, sino todo lo contrario. Ya en otro lado proponíamos lo que llamamos “horizontalismo centralizado” como modelo superador a las perspectivas verticalistas y las plenamente horizontales: http://rizoma-grupos.blogspot.com.ar/2012/03/el-horizontalismo-centralizado-como.html

En relación a la experiencia en conducción institucional, como así a mi formación en políticas públicas y en teoría y técnica de grupos, vamos a proponer lineamientos generales de lo que podríamos llamar a nuestros ojos, una verdadera estrategia de construcción político-institucional:

1.       El perfil de conducción debe incluir:
a.       Un diagnóstico de la propias limitaciones y saberes, como así también de las habilidades y “puntos fuertes” de su propia personalidad.
b.      Predisposición al cambio en función al intercambio con los empleados.
c.       Disponibilidad para aprender más ala de lo que ya sabe o de lo que siente que sabe o debe saber.
d.      Conciencia de la responsabilidad política y de conducción con respecto al funcionamiento de ese equipo y área de trabajo.
e.      Perfil de liderazgo por sobre el perfil de jefe. El primero implica empatía y ejemplo.
f.        Habilidades de persuasión y convencimiento en torno a la dimensión más ideológica o abstracta (no tiene que ver con las acciones concretas, sino con el plano de las ideas).
g.       Disponibilidad para escuchar a todos.
h.      Debe ser un militante. El conductor en lo público, no puede no ser un militante, ya sea del partido político que gobierna, o del estado como concepto, o de una ley. Un líder sin militancia es simplemente un jefe, y la opción de conducción que le queda es la del clientelismo político o el autoritarismo.

2.       La estrategia de conducción:
a.       Aprender mínimamente sobre las disciplinas de los empleados. Lo cual va a posibilitar entenderlos, evaluarlos y empoderarlos o formarlos desde su propio “lenguaje”.
b.      Establecer en un lugar privilegiado las instancias de planificación colectiva, como por ejemplo las reuniones de equipo (ver horizontalismo centralizado). No alcanza con solo juntarse, hay que conducirlas y dinamizar una construcción colectiva del saber y una apropiación de lo producido en cada persona (sino todo queda solamente en meros dichos).
c.       Una evaluación de los procesos individuales de los empleados, del proceso institucional y del impacto de las intervenciones que ese equipo realiza en la comunidad. Estas deben ser acciones sistemáticas, que pueden tener que ver con las reuniones de equipo o con una “plantilla” de funcionamiento institucional y de procedimientos que podemos revisar e cualquier momento (registros de intervenciones, actas, etc.).
d.      No alcanza con el hacer. El saber debe orientar el hacer y ese hacer debe ser coherente  con legislaciones, con determinada ideología política de conducción, con cierta idea-fin de la institución, y otras características “abstractas” que hacen a la direccionalidad del funcionamiento. El establecer ese norte, es responsabilidad ineludible del conductor.
e.      Los perfiles de personalidades y los perfiles profesionales deben ser acordes al objeto de trabajo de la institución. No todos los tallerista pueden trabajar desde una perspectivas de derechos en niñez, ni todos los profesionales con perspectiva de género, etc., más allá de su formación académica. También es necesario entender que un título no garantiza un saber específico, ni que un saber especifico garantiza un “saber hacer2 en lo concreto.
f.        El conductor debe promover y posibilitar la continua formación de su equipo de trabajo. No solamente para actualizar y recordar la propia formación, sino también para revalorizar y reconocer su rol específicamente profesional.



Continuará….


 Luciano Palacios








lunes, 20 de julio de 2015

Dualismos... hombre mujer - capitalista proletario

"Las relaciones de poder se ejercen en la medida en que hay una diferencia entre fuerzas".

Y no hay "diferencia" mas estrategica que aplicar un disvalor o valor a uno de los terminos en un binomio ontológico.

sábado, 4 de julio de 2015

Feminismo(s) y Machismo(s). Genero y violencia.


He aquí, un descargo mezclado en una ensalada académica, que considero necesario que empecemos a degustar..

Si hay algo que nos enseña la psicología y que luego uno refuerza trabajando en Educación Sexual Integral, es que no puede haber un abordaje de la sexualidad serio sin la presencia de una reflexión hacia unx mismx, y si pensamos particularmente en la "seriedad" de algunos feminismos (así, en plural), tendremos razón para pensar y escribir mucho debajo de estas líneas.

Ahí vamos…..

Llamo "feminismo serio" (para no inventar un neologismo) a aquel movimiento político, cultural, ideológico, social e individual que lucha por la igualdad de derechos entre las mujeres y los hombres, como así por la equidad en el acceso a las oportunidades para la participación social (trabajo, política, educación, etc.). Entiendo este movimiento como una problematización del machismo y el patriarcado, y no de los seres humanos que entran en la categoría anatómica de varones. El “feminismo serio” también incluye la problematización del machismo y el patriarcado presente en las mujeres.

Vayamos al punto. Siento que hay muchx pseudo academicistas y militantes que andan por ahí enarbolando las banderas de determinado feminismo, y que lo único que terminan haciendo es una formación reactiva al machismo. Es decir, crean un feminismo basado en el odio hacia el machismo y al patriarcado, y que no es lo mismo que  creado o basado en el “amor a la concepción ideológica de la equidad y la igualdad de derechos".

También pienso que a menudo algunos "ismos", ahora "fem", llegan al punto de desconocer al otro como igual en tanto sujeto de derechos y como "categoría ontológica", tal como ocurre en el "ismo" del tipo "mach". Si bien los “ismos” siempre hacen alusión a la ideología en el plano de la universalidad y en la negación de la particularidad, hay que tener en cuenta las implicancias y alcances que esa universalidad tiene sobre lo diverso o distinto.

En síntesis: Me da la impresión que a veces, de repente, el machismo deja de ser un discurso productor de subjetividad (Lacan Foucault, Deleauce), para pasar a describir e incluso nombrar a todos los seres humanos con pitos y heterosexuales. Y debo decirlo, me da por las bolas, porque tengo pito, soy heterosexual, no me considero machista, problematizo el patriarcado y critico mi posición heteronormativa todo lo que puedo, en cada cosa que hago, y con mucho más énfasis en mi ámbito laboral.

Leer esta diferencia de “enfoques” es fácil y todxs la entendemos, pero ejercerla sin pensarse a si mismx como seres individuales y subjetivizados, es muy difícil, y más aún cuando uno encarna un “ismo” desde una fuerte impronta emocional y autobiográfica.

Algunos ejemplos de discursos desde estos feminismos “no serios”:

“Los hombres deben renunciar a su lugar de privilegio social”. Y muchxs, seguramente, pensaron primero en el ámbito laboral y político. Ahora bien, ¿Quién y cómo se determina cuando un varón accede por su propia capacidad y no por su condición de género masculino, a un puesto laboral o político?”… Se ve como lo universal del discurso, y casi sin darnos cuenta, termina negando lo particular. Podemos ir más allá aún: a menudo se entiende el acceso “previliegiado” del hombre a determinados puestos, como una CONDICIÓN NECESARIA de que la paso bárbaro, y que nunca sufrió ni padeció los avatares del machismo y el patriarcado. Y seguramente, una ultra feminista antes de terminar de leer esa frase pensará: “no en la misma medida, o no es ni parecido”, y yo les pregunto ¿Quién y como establece una “regla de medición” del sufrimiento y la angustia?. Pareciera como si la exigencia del “hombre proveedor”, del “hombre exitoso”, o la soledad existencial de “los mujeriegos”, la “imposibilidad” de demostrar emociones abiertamente, o los mismos varones que no pueden escapar a la mirada y expectativas del otro, fueran tipos de sufrimiento de “segunda mano” frente a la angustia de las mujeres por la desigualdad de género. Los varones también somos víctimas del machismo y la lógica patriarcal., y que no quepa ninguna duda de que también sufrimos sus consecuencias.

“Cualquier hecho de violencia hacia las mujeres es violencia de género, sin importar la violencia de la mujer hacia el varón”. Hoy en día esto es muy común de escuchar, debido a la oportuna visibilidad que nuestra sociedad le ha otorgado a las problemáticas de violencia de género. Pero acá tenemos que distinguir algunas cosas. No es lo mismo decir “violencia hacia las mujeres” que decir “violencia de género”. La primera proposición hace alusión a la condición biológica, anatómica o de identidad de género, mientras que la segunda refiere exclusivamente al “genero” como categoría. Y no se puede hablar de género sin hablar de estereotipo de género. Toda construcción de identidad de género se basa en estereotipos, ya que este ultimo es una construcción de consenso social. En cambio, la identidad de género está conformada por el “estereotipo para determinado género” mezclado con la individualidad o elección de esa persona singular. Esto es lo que explica que una travesti con identidad de género femenina quiera vestirse con un vestido y se pinte los labios. Esto ocurre porque esa vestimenta particular está dentro de los objetos socialmente reconocidos del género “femenino”, pero tranquilamente podría usarlo un varón heterosexual como ocurre con las polleras en escocia. Entonces, desde el punto de vista de derechos y sufrimientos ¿Por qué es distinta la violencia hacia las mujeres que la violencia hacia los varones?... y Acá aparecen los discursos asociados a la “potencia física” de ellos, argumento que entra en tensión con el hecho de que dentro de las violencias hacia las mujeres se le otorga una importancia privilegiada a la violencia psicológica, porque “muchas veces” es la condición posible de la violencia física posterior. Si esta violencia psicológica es igual de importante que la física, invalida al discurso de que “la potencia física” sea la “variable determinante” de la idea de “violencia hacia las mujeres”. Por lo tanto considero más apropiado el término “violencia de género”, porque hace eje en la desigualdad existente entre ambos géneros, como así también en el hecho de que los varones tenemos ciertos privilegios por medio del consenso social, y que habilitan a algunos a ejercer violencia con cierta o total impunidad, pero que en modo alguno evitan que las mujeres la ejerzan. Diciendo esto, también debemos decir que no siempre la violencia de género es entendida como tal, sino que es entendida como violencia hacia las mujeres. Y esto lleva a no “pensar”, investigar o establecer las razones de esa o esas violencias. Muchas veces ocurre, y lo he visto varias veces en el Servicio Local (en la minoría de los casos), en donde una situación de mutua violencia entre ambos géneros se visibiliza como una situación de violencia de género (es decir, en esos casos en los cuales la  variable “desigualdad de género” no es determinante de la situación de violencia), y por ende se llega a la victimización total de la mujer y a la culpabilización total del varón. Como dijimos, estos casos son minoría, y la mayoría de los casos ocurren al revés:  un juez machista resolviendo a favor del tipo que ejerce la violencia de forma sostenida, en post, a la “unidad familiar” entre otras escusas simplistas. Como dijimos antes, ciertos intentos de generalizar violentan la particularidad. Y eso no será violencia de género, pero sin dudas es violencia. Desde esta posición adhiero a la lucha contra la violencia de género, pero no estoy de acuerdo con entenderla como violencia hacia las mujeres porque hace eje sobre la identidad y no sobre el género. Por otro lado, como varón heterosexual, me gustaría también sentirme protegido frente a la violencia que una mujer pueda ejercer sobre mí, sobre todo en términos psicológicos y patrimoniales. Es más, también frente a la posible violencia institucional, que puede ocurrir en el marco de la sensibilización política y social que hay dentro de la llamada “violencia de género”, se pueda usar en mi contra como un simple castigo. En este contexto ¿es más importante que un varón le diga “puta” a una mujer que una mujer le diga “puto” a un hombre? (siempre entendiéndolo como agresión, claro, porque otro “problema” concreto está en la situación de diagnóstico de la problemática, porque las palabras y la “violencia” psicología no se pueden descontextualizas, ni generalizada en su semantica particular. Por eso es importante la formación en perspectivas de género de los profesionales encargados en abordar estos temas (y no en un mero protocolo de como simplificar situaciones complejas privilegiando a la mujer en la interpretación).

“El caso Barreda es un feminicidio”: Se ha escuchado muchas veces esta afirmación y es por todos lados falsa. ¿Todas y todos saben cuál es la definición de feminicidio más allá de que se use cotidianamente? “Feminicidio o femicidio es un neologismo creado a través de la traducción del vocablo inglés femicide y se refiere al asesinato de mujeres por razones de género.” El caso Barreda no tiene una connotación de género, aun cuando eran todas mujeres las fallecidas. Es un caso de psicosis, y el criterio utilizado para el asesinato, se encuentra dentro de la trama misma de su ideación delirante, y que por ende es enteramente individual.
Es complejo, ya lo sé, incluso para seguir una línea de redacción, porque son temas controversiales y con muchas aristas sin resolver ni afilar. No obstante, es importante que desnaturalicemos, incluso, los intentos mismos de desnaturalizar. Nunca más pertinente la alegoría de la caverna de Platón

CONCLUSIONES:

Así como yo he tenido que problematizar mis propios prejuicios para trabajar temáticas de diversidad sexual desde mi posición heterosexual, muchxs feministas debieran problematizar sus propios atravesamientos subjetivos, para evaluar como su propia subjetividad condiciona y determina la visión sobre las problemáticas de género.

El feminismo no puede ni debe ser, sin integrar a los hombres en su lucha.

Considero la aplicación de la ESI como fundamental para que tantos mujeres y hombre, empiecen a problematizar no solo el machismo y el patriarcado, sino la forma reactiva de entender el feminismo.

Lxs psicoanalistas debieran tenerse en cuenta en estas discusiones. Es evidente la relación que existe entre el discurso feminista (no serio) con el discurso histérico (conceptos de Lacan y que no corresponden a términos del sentido común).

La construcción de una perspectiva de equidad y derechos, no puede estar basada en procedimientos explícitos o implícitos que segreguen o estigmaticen al otro.

Con respecto al concepto de violencia de genero, es importante que podamos diferenciarlo de vínculos violentos, y de violencia a secas. 

Es necesario que la mirada masculina y heterosexual se atenida en cuenta en la estrategia feminista.



por Luciano Palacios




miércoles, 24 de junio de 2015

Carta de la angustia hacia vos...



"¡Hola!

Soy la angustia, no te asustes… vengo en son de paz, por cierto, ¿por qué te asustas tanto ante mi presencia?
Digo, sé que sientes horrible cada vez que aparezco, que te desesperas y quisieras mandarme a volar, sé que si pudieras… me matarías, sobre todo porque crees que soy yo la que te quiere matar o hacer daño, pero créeme, si no te he matado, no lo voy a hacer.
No estoy aquí para hacerte daño, mucho menos para volverte loco, creo que ya te lo he demostrado cada vez que llego a tu cuerpo, hago un relajo y te asusto, pero al final del día… no te he matado, no te has vuelto loco.
Si pudiera, lo haría, pero esa no es mi idea.
La verdad es que aparezco y te hago sentir todo eso porque no había logrado encontrar otra manera de hacerme escuchar por ti, estabas tan ocupado tratando de ser exitoso, productivo y de demostrarle a los demás que eres digno de ser amado… que no escuchabas mis pequeñas señales.
¿Recuerdas esa vez que te dio un dolor de cabeza? ¿O cuando tuviste insomnio por más de 2 horas? ¿O qué tal esa vez que sin razón aparente te soltaste a llorar?
Bueno, pues todas esas veces era yo tratando de que me escucharas, pero no lo hiciste, seguiste con tu ritmo de vida, seguiste con tu misma manera de pensar… Entonces intenté algo más fuerte, hice que te temblara el ojo, que se te taparan los oídos y que te sudaran las manos… pero tampoco me quisiste escuchar.
Aunque acá entre nos, los dos sabemos que sentías mi presencia, es por eso que cuando te quedabas tranquilo… o era momento de estar sólo contigo mismo, en soledad… te empezabas a poner nervioso, como si algo te impidiera quedarte quieto.
Te desesperabas, porque no “entendías” con tu mente racional lo que estaba pasando, y claro, con tu mente racional no me ibas a entender.
Así es que por eso me he rendido y decidí escribirte.
Y te felicito si estás leyendo lo que te digo, porque significa que ya tienes el valor de escucharme, y créeme, nadie mejor que yo sabe de tu gran habilidad para evitarme y salir corriendo, huyendo de mí como huirías del monstruo en el bosque oscuro.
Como esas veces que me evitas y te distraes embobándote horas con la televisión, viviendo las vidas de otras personas que ni conoces para no enfrentar que la tuya no te gusta.
O qué tal, de esas veces que con un par de cubitas lograbas adormecer tus nervios e inquietud; y ni qué decir de esas otras substancias que más allá de adormecerte, te fugan de esta realidad que no quieres enfrentar.
Pero bueno, espero que ahora estés listo y lista para enfrentar tu realidad y escucharme por fin.  Espero que estés listo y lista para enfrentar la verdad de tu vida y de ti mismo tal y como es, sin máscaras, sin atajos… sin pretensiones.  Así es que aquí te van las cosas como son.
Lo único que llevo tratándote de decir todo este tiempo, es que… ya es tiempo de evolucionar, necesitas hacerlo, no hay de otra.
Necesitas crear cambios muy profundos dentro de ti, pues por alguna razón, en realidad no estás disfrutando de tu vida y no te sientes pleno.  Por eso yo estoy aquí, para ayudarte a recuperar esa plenitud que vive dentro de ti, y para lograrlo, tendrás que deshacerte de lo que te impide contactarla.
Estoy aquí para ayudarte a ver precisamente qué te impide contactar con tu sentido de vida, con tu pasión por vivir, con tu alegría y con tu verdadero ser que es tu esencia.  Cada vez que yo aparezca en tu vida, será porque por ti mismo no te has dado cuenta que no estás siendo pleno y feliz, así es que si vuelvo a aparecer, no te asustes… mejor agradéceme que llegué y escúchame.
Y si realmente me escuchas, no tardarás en hacer los cambios que necesitas hacer en tu vida, los harás de inmediato, claro, eso si realmente quieres sentirte bien de nuevo, todo depende de qué tanto quieras.  Y se que sí quieres, pero a la vez sé que quieres seguir en tu confort y en tu comodidad por vivir con lo “conocido”, aunque eso conocido te haga daño.
Prefieres seguir buscando la aprobación y aceptación de los demás, haciendo hasta lo imposible por llamar su atención; buscando seguridad en otras personas menos en ti; prefieres que los demás sean responsables de tu persona que tú mismo, y claro, te entiendo, todos quisiéramos regresar a la panza de nuestra mamá y despreocuparnos de todo.
Pero… te tengo una noticia, solamente entrando a un temazcal podrás acercarte a esa experiencia.  Mientras tanto… necesitas asumir que eres responsable de ti y que solamente tú me podrás escuchar, y cuando me escuches y yo vea que ya me hiciste caso, créeme que me iré.  Solamente tú puedes hacer que me vaya.
Y eso es algo muy importante que te quiero decir, en verdad me iré en cuanto vea que estás haciendo esos cambios en tu vida, cuando vea que estás en camino a tu evolución y que estás dispuesto a crecer y recuperarte a ti mismo.  Mientras no lo hagas… aquí seguiré.
En conclusión, si hoy estoy aquí, es porque me necesitas.
Necesitas de mi para modificar tu manera de interpretar tu realidad, la cual dejame decirte que está un poco distorsionada.  Necesitas deshacerte de creencias que no te ayudan y que nada más te limitan; necesitas perdonar todo ese enojo que guardas a tus seres queridos y recuperar tu libertad interior.
Y sobre todo, necesitas de mí para hacer lo que te gusta de la vida, para ser tú mismo, y perder el miedo al rechazo o abandono de los demás.
Necesitas de mí para ponerle límites a las personas que te lastiman; para que te agarres de valor y aprendas a decir que “no”; para que dejes de mendigar amor con quien no te merece; para que dejes de depender de la existencia de tu pareja para ser feliz; para que de una vez por todas… ¡cuides tu cuerpo!
¿De qué otra manera le habrías puesto atención a tu cuerpo? Digo, probablemente de muchas maneras, pero ésta está funcionando.  Necesitas darle el alimento que necesita, dejar de criticar tu físico y agradecerle por lo que te da; haz que sude y que se mueva, ten tus hormonas al día y duerme las horas que necesitas.
¿Por qué te explotas? ¿Por qué te exiges tanto? No entiendo porque lo haces… si lo tienes todo, lo eres todo, tienes toda la capacidad que necesitas para crear tu propia realidad, pero te tratas como tu propio esclavo, eres demasiado severo contigo mismo… y estoy aquí para pedirte que simplemente dejes de hacerlo.
Así es que ya sabes… si realmente quieres que me vaya, toma el timón de ti mismo, pregúntate qué has hecho que te ha sacado de tu equilibrio interior. Pregúntate realmente cómo quieres vivir y lucha por esa vida, es tu vida, y solamente tú puedes decidir sobre ella… si a los demás no les parece, es porque los estás retando y tarde o temprano te seguirán, y si no… tendrán otra oportunidad, dales chance.
El único control que puedes tomar es el de ti mismo, pero para recuperarlo, tendrás que aceptar que lo has perdido, y que dejes que yo me exprese, que salga a decirte con todos esos síntomas tan horribles que me inventé para decirte algo muy claro, pero si me reprimes y te distraes cada vez que llego… no podré hablarte y vendré más fuerte.
Así es que la próxima vez que me sientas llegar, haz un alto, cierra los ojos… déjate sentir todo lo que te estoy diciendo, apaga tu mente racional por un momento, déjate llevar… y entiéndeme.  Después, empieza el cambio en tu vida con acciones claras y específicas, y en menos de que te des cuenta, me iré.
Espero no tener que llegar muchas veces más en tu vida, pero si lo hago… recuerda que no quiero lastimarte, quiero ayudarte a que recuperes tu propio camino de evolución, el camino que si lo tomas, te hará mucho muy feliz.
Y ya para terminar, ojalá que puedas verme como lo que soy: tú esencia.
Soy tú mismo gritándote con desesperación que me escuches por favor. Así es que hola, yo soy tú, hablándote desde el fondo de tu corazón, desesperado tocándolo para que me pongas atención, lo que sientes no es taquicardia, soy yo, tu esencia, que quiere salir de ahí.

Con cariño, tú esencia disfrazada de angustia."


Sin angustia no hay aprendizaje verdadero, sin angustia no hay cambio subjetivo... sin angustia no hay crecimiento... 
La angustia es parte de nuestra condición de humanos, y la tolerancia de nuestra propia angustia como así la empatia frente a la ajena, nos acerca al reconocimiento propio y ajeno de como realmente somos, y no como los mandatos sociales prescriben que debemos ser...

La angustia y el deseo nos conectan con lo estrictamente individual, son las alarmas para no mentirnos a nosotros mismos.... nos permiten amar lo real, lo imperfecto, la no complementariedad, y problematizar lo imaginario, lo ideal, el cuento de hadas, la ficción y la complementariedad perfecta al estilo media naranja..

domingo, 8 de marzo de 2015

Película "The Great Hypnotist" (recomendación)



Link a la película:

http://miradetodo.com.ar/video/Y6OB7KB62Y73/The-Great-Hypnotist-Cui-mian-da-shi-2014-VER-COMPLETA-ONLINE-1080p-FULL-HD

"El punto de vista crea al objeto" (Saussure)... una de mis frases preferidas que dice tanto de nuestro lenguaje como de nuestra condición de humanos.

La película es un trhiller-drama psicológico muy bien logrado, en el marco de una relación terapéutica... no aburre para nada, y te mantiene atrapado todo el tiempo. Se las recomiendo...

Para aquellos que han estudiado psicología, y mas allá de situarse con criticas en lo referido al método, seguro que la van a encontrar muy interesante desde el punto de vista epistemico de la subjetividad.

No se puede decir mucho mas sin arruinar la trama, ja, veanla...

Saludos

Luciano

lunes, 2 de marzo de 2015

Documental "Un mentiroso Honesto" (recomendación)


Un documental acerca de un famoso mago que dedico toda su vida a develar los engaños de psíquicos y pastores evangélicos... es un documental acerca del engaño, la verdad, y la discusión acerca de si hay engaños que son validos cuando su propósito es develar una verdad mas trascendental. El rol del mago como engañador-honesto, en diferencia a los engañadores-estafadores.

Es posible una lectura desde la teoría de la ideología en Zizek, y ejemplifica muy bien la angustia de lo real, y el efecto apaciguador del engaño, la necesidad de creer aun cuando nos muestran la mentira.

http://miradetodo.com.ar/video/YK4XA5749K8M/An-Honest-Liar-2014-VER-COMPLETA-ONLINE-720p-HD

¿“50 sombras de Grey” o “50 cuentos de hadas patriarcales”?




Antes de empezar con una opinión, critica o como quieran llamarlo, es necesario que yo mismo piense en mis implicaciones en este relato. Tratare de problematizar esa “envidia” fálica que muchas veces orienta las críticas de hombres frente a otros hombres, personajes o historias, deseado o venerados por un sector de la sociedad, y que en este caso, son mayoritariamente mujeres.
No se trata aquí de lo que Grey tiene y yo quisiera tener o hacer (si es que ese fuera el caso), sino que más bien nos focalizaremos en el nudo de la trama de la película (no leí los libros), y que no es otra cosa que el vínculo entre Anastasia y Grey, y el contexto de la historia delimitado por el poder simbólico, sexual, material, machista de Grey, y la pasividad simbólica, sexual y angustiante de Anastasia, al menos hasta el final de la película. También nos gustaría reflexionar acerca del éxito de ventas alrededor de los libros y la película, y la correspondiente pregunta acerca de porque genera tanta ¿atracción?, ¿fascinación?, en determinado conjunto de personas, y en su amplia mayoría personas situadas en un rol femenino (y que llamaremos mujeres en referencia a la anatomía, para ilustrar el punto de vista en aquellos lectores no familiarizados con la diferencia entre género y sexo anatómico o con la teoría psicoanalítica).
Lo que más me hace ruido:
-          - Anastasia se ¿enamora? inmediatamente de Grey, sin siquiera llegar a conocerlo. Por ende suponemos que este carácter de atracción más allá del deseo sexual o de sus propias fantasías, tiene que estar relacionado con la asimetría, con la posición de Grey con respecto a la suya, y con su lugar de poder. No importa tanto las cualidades personales de él para haber llegado a donde llegó, sino su status quo (actual). También cumple un rol importante su amiga y la identificación con Anastasia, ya que es ella quien introduce este deseo sobre el “soltero más codiciado”. Pero preguntémonos ¿Por qué es tan codiciado?, ¿Qué similitud tiene con los personajes reales que se venden por la prensa de la misma manera?, ¿a qué tipo de clisé responde para que su atracción sea tan general, y no tan particular?. Creo que más de uno encontrara la repuesta en las clásicas novelas mexicanas de Thalía, y más atrás aun en los cuentos de hadas con sus príncipes azules.

-          - Otro punto, y tal vez el más polémico, es la asimetría en la relación entre Anastasia y Grey. Pareciera que la película tratara de justificar o de confundir el tipo de goce particular de Grey, con la forma social de dominación que ejerce en los ámbitos “no sexuales” con las mujeres. Su rol activo, de control, de poder, no queda circunscripto en el ámbito sexual o en su “sala de juegos”, o en sus fantasías de sádico-dominador que previo consenso con su pareja es totalmente ajeno a cualquier prescripción moral que uno pueda tener, sino que es extendido a todos los ámbitos de la  vida de Anastasia. El tema es que ella misma parece sufrir de esa situación. No obstante su fascinación por ese hombre parece más fuerte que el sufrimiento de su desplazamiento subjetivo, sosteniendolo hasta el final de la película, en donde una situación física pone el límite de su tolerancia, como si la cuestión simbólica de asimetría, y más importante que la anterior, no hubiera estado presente desde el inicio. Podríamos hablar también del fantasma histérico en Anastasia, y el obsesivo en Grey desde una perspectiva psicoanalítica, pero trasciende el análisis político dentro del cual estamos focalizados.

-          - El guion le da un especial interés a la demostración y ostentación del poder material de Grey haciendo mucho énfasis en los autos, la casa, el helicóptero, los regalos, y el disfrute y la aceptación de Anastasia para con ellos. Nada de ello se desvía dentro del estereotipo de género del hombre exitoso materialmente hablando, y de la mujer que venera esa ostentación “fálica” acorde a nuestra sociedad de consumo (entre otras tantas posibles).

-               -   Es hora de un punto también polémico, aunque como ya dijimos no el más importante de todos que era el de la violencia implícita en cualquier relación asimétrica continua (todas las relaciones son asimétricas desde mi posición, pero no constantes, ni unidireccionales). El presente eje tiene que ver con la siguiente pregunta: ¿Por qué causa tanta atracción o fascinación esta película?. No trataremos de contestar tajantemente, sino de instaurar ejes de análisis y de problematización, en tres dimensiones totalmente relacionadas entre si: 1) lo trans-subjetivo, 2) lo inter-subjetivo, y 3) lo itra-subjetivo. Desde lo transsubjetivo (cultura, ideología) podemos situar la consonancia del guion con los estereotipos de género instalados en esta sociedad patriarcal (y todo lo que ello implica: relaciones de poder, desigualdad, menosprecio de la mujer, etc.), pero también con la instalación del libro y la película como un objeto de mercado en su forma más explícita, es decir como mercancía (Marx). Es esta última acepción podemos contestar con otra pregunta ¿Por qué deseamos tanto tomar Coca-Cola, o tener un Ferrari, o la mejor cartera de Praga?. Desde la dimensión intersubjetiva (el vínculo), podemos pensar en cómo la relación entre personas se encuentra mediada por las cosas, lo cual es parte de la fetichización de la mercancía en Marx. Presten atención como un grupo de amigas se juntan a hablar del libro, de la película, van juntas al cine, se comprar el merchandasing (¿está bien escrito? yo hablo castellano) como el látigo, las esposas, etc. También anhelan la vuelta en helicóptero y hasta se jactan entre ellas de lo nuevo de Grey que se compraron, lo cual obtura o descentra la discusión acerca de la misma historia de la película, su implicancia y sus fundamentos (“La recaída en la inmediatez”, reformulada por Samaja y tomada de Hegel). No es una lectura con mala intención, y seguramente yo no lo haga mejor con otras cuestiones de nuestra cultura, pero nuestro propósito es problematizar. Hemos llegado hasta aquí, y este punto nos lleva a la siguiente dimensión: lo intrasubjetivo (individual, psíquico). Ya Lacan en su momento habría mencionado la similitud entre el discurso capitalista y el histérico, y creo que no es un mal lugar por donde comenzar (nos referimos a la histeria desde el sentido psicoanalítico y no desde el sentido común, o como es utilizado socialmente). Está a la vista que algo del deseo de las fanáticas y fanáticos engancha con la historia, y dentro de esos enganches se encuentra el de la fantasía y la identificación al personaje de Anastasia dentro del subtexto sexual de la película. He escuchado numerosos relatos de amigas y conocidas en donde se  lee algo acerca de las fantasías con la escena de sumisión pero manteniéndola como imposible, o al menos no al límite mostrado en la película, que es referida explícitamente a la dinámica sadomasoquista, aunque “light” por decirlo de alguna forma. Lo que quiero decir es que esas mujeres no creo que llegarían a esos límites, y si lo hicieran, muy seguramente tendrían el mismo resultado que Anastasia, y es la situación limite, en donde se dan la oportunidad de ser consonantes con su propios deseos y no los del otro. Creo que aquí si hay que diferenciar aquellas o aquellos que realmente tienen una fantasía sexual de sumisión y que están dispuestas a explorarlas en hechos concretos, de las o los que se generan cierta “intriga” o pregunta acerca de cómo una mujer goza en ese rol, y esto es una referencia explícita a la pantomima histérica (Lacan) y a su identificación con la “otra” mujer.


Hasta aquí, los puntos más importantes de problematización según mi visión del texto de la película y de su contexto socio-cultural.
Por otro lado, me parece una película estéticamente medianamente lograda, las escenas de sexo me gustaron, despiertan cierta “sensualidad” como así también las escenas de seducción. La trama no me parece elaborada, y ya hicimos una crítica al respecto. Para quienes adscribimos a determinado paradigma de “libertad sexual por llamarlo de alguna forma (y que problematiza estereotipos,  categorías, rutinas y la moral religiosa), vamos a encontrar más chamuyos que realidades pero convengamos que es una película y no un documental. En su generalidad y según mi criterio, no es una película que volvería a ver ni me parece una gran obra del arte cinematográfico, y de hecho no creo que llegue ni siquiera a buena, aunque si entretiene y me ha permitido pensar todo lo escrito hasta aquí.

Saludos


Luciano


p.d: la imagen de esta entrada del blog, fue específicamente elegida para captar la atención según la lógica del mercado anteriormente mencionada, jajajaja. 

sábado, 28 de febrero de 2015

El STMA, la lucha sindical, ANSES, la Municipalidad de Azul, y Maquiavelo



A menudo la tibieza política queda justificada por sus actores como pensamiento estratégico político, pero en realidad no conforma más que un sencillo engaño a aquellos destinatarios de sus propios discursos. Se puede hacer política con la verdad, se puede hacer una buena política sin violencia.




Hoy hablaremos de lo acontecido en el día de ayer en las instalaciones del SUMAC, dependencia municipal de la ciudad de Azul en donde se realizó un acto de entrega de los nuevos beneficios jubilatorios y de la Tarjeta Argenta, ambos beneficios que amplían los derechos de los jubilados a través de la ANSES liderada a nivel nacional por Diego Bossio, y a nivel local por Omar Seoane.
No era cualquier acto… asistieron numeros os jubilados de la ciudad de Azul quienes esperaron durante años este momento, asistieron funcionarios municipales, funcionarios de la ANSES local, y también iba a asistir Diego Bossio, visita que fue suspendida por los conflictos que se desataron tras la irrupción repentina de integrantes del Sindicato de Trabajadores Municipales (STM) de Azul (STMA) con el apoyo de sus compañeros de Olavarría (STMO).

Si bien los manifestantes eran un grupo altamente reducido, realizaron sus entrada con bombos y silbatos a un lugar cerrado que contaba con la presencia de numerosos abuelos y abuelas, que no solo se vieron afectados por la interrupción de su propio acto de reconocimiento frente al esfuerzo de trabajo de toda una vida, o en la ampliación de derechos que le corresponden, sino que se vieron afectados físicamente por los fuertes ruidos, y por supuesto psíquicamente por la situación de violencia simbólica que implicó el acontecimiento.

No vamos a discutir aquí, si los reclamos del STMA y su líder Varela, hacia el Gobierno Municipal eran legítimos o no (cuestión que uno puede ahondar tras la legitima repuesta del estado municipal a través de su intendente José Inza), sino que interpelaremos la modalidad de protesta que muchas veces la lucha sindical adopta. Es una discusión acerca de los “modos”, y de las implicaciones ciudadanas, políticas y gubernamentales que se deprenden de dichas formas.

Estamos acostumbrados a naturalizar el pasado y sus efectos sobre el presente, y de ahí se desprenden afirmaciones como “es así, siempre fue así”, o “es la única forma en que escuchen a los trababajadores”, “así es la política”, y la verdad que no es algo a lo que yo adhiera.

No me quiero acostumbra a la mediocridad de lo que fue y resignarme a que nada se puede mejorar, no quiero una política sumida en la violencia, en el apriete o la intimidación, en el clientelismo político o en el “amiguismo”. Tampoco quiero que las luchas por los derechos laborales vulneren otros derechos de la comunidad.

Pero si quiero un sindicalismo que organice a los trabajadores, y que bregue por su derechos de forma igualitaria para todos sus miembros, si quiero y apuesto a que la política y la organización sea una herramienta formidable y efectiva de lucha y creación social… Si quiero que la política sea un modo de organización para causas nobles, justas y de intereses colectivos, no personalistas.

Pero gente, EL FIN NO PUEDE JUSTIFICAR LOS MEDIOS, no en democracia y menos en política (valga la redundancia con el concepto de democracia).
No digo que no pase, digo que no debería.
El despotismo, y la ausencia de ética, moral o principios colectivos, no son atributo “maquiavélicos” que se le puedan aplicar a “la” política como si ella misma fuera un ente de carne y hueso, pero si es aplicable a todos nosotros, ya que creamos a la política todos los días, a imagen y semejanza de nuestros ejercicios ciudadanos y sociales.

Varela y sus militantes se equivocaron, y con esa equivocación ayudan a deslegitimar la lucha gremial o sindical. No solo se equivocaron el viernes, también lo hicieron el jueves en la municipalidad tomando el edificio y entorpeciendo el trabajo cotidiano de sus propios compañeros de la planta municipal, utilizando la violencia psicológica y a menudo física para lograr sus objetivos. No es la forma muchachos.

Tampoco esto no se trata de River o Boca, o si estoy a favor del STMA o no, no es futbol, es política y la idea de “bandos” en política me parece muy trivial y anecdótica, no pasa por ahí la discusión, pasa por qué ejemplo que le queremos dar a nuestros hijos, nuestros seres queridos, nuestra conciudadanos, nuestros compañeros militantes de lo que debe ser la política.

Así planteado, y por mas vuelta que se le busque al tema, el STMA pareciera estar en contra de los derechos de los jubilados.... digan lo que digan, es lo que demostraron (aunque no quisieran).

Una política sin ética, sin moral, sin diagnostico ni dialogo, no vale la pena.

Digo lo que digo dentro de un contexto particular: como trabajador de la municipalidad de Azul, y como militante de la agrupación Don Cipriano. Si bien el presente conforma una opinión enteramente individual, hace a la posición desde donde opino, que siempre debe ser clara en aquellos que nos gusta hablar de política seriamente.

Esa es mi posición y opinión particular, sin vericuetos, ni grises, ni tibieza.


Por Luciano Palacios