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lunes, 18 de noviembre de 2013

El retorno de lo pendiente

Lo que no fue o lo que fue a medias, eso !... lo pendiente...

El pasado que insiste... el deseo que empuja...

El olvido que recordó... el pasado que camina...

Todo vuelve... sobre todo... lo pendiente...

Prejuicio y ratas

Que hay detras detras de un prejuicio? Posiblemente una ausencia de creatividad, una imposibilidad para contemplar que haya otros aconteceres del previsto prejuiciosamente...

que mas?...
seguramente tambien haya una inseguridad taponada por una certeza caprichosa,  una repetición de lo mismo y lo propio, una negación de la diversidad de los otros, y por supuesto tambien,
un autoerotismo intelectualizante..

Dejá lugar para la sorpresa conciencia cobarde...

tu cabeza está llena de ratas...

Giran y giran en una rueda...

sin mas destino que la repetición.

martes, 5 de noviembre de 2013

Política, demanda y queja

La queja... esa pequeña palabra que indunda en el sentido común,  el amplio y complejo mundo de la política.

No quiere decir que los políticos no se hayan ganado su reputación,  pero muchas otras veces, la mayoria de las veces digamos,  es una queja fundada en el prejuicio, el desconocimiento o en la experiencia previa con otros actores de ese ambito. De una u otra forma no son siempre opiniones justificadas, sino mas bien producto de una percepción intuitiva o producto de opiniones ya formadas por medios de comunicación masivos.

Mas alla de toda esta cuestión, el exito politico de una persona (en el mejor de los casos)  se debe a saber captar, representar, o responder a las demandas de la mayoria de la población. Por supuesto que también nos encontramos con aquel otro que construye su lugar político desde el mero y solo marketing, pero que de todas formas responde a lo que la gente espera o demanda de esa persona.

El punto anterior nos lleva a que el político es imagen y semejanza de la población, ya que esta última legitima a travez de su voto y de su militancia conciente o inconciente, el rol o función de ese mismo político.

Entonces, ¿de que se queja el ciudadano común?

Muchas veces la queja tiene una razón real y concreta, debido a que enuncia un problema real y concreto, pero la mayoria de las veces, sobre todo en la clase media, la queja está basada en la proyección de la queja hacia si mismo.
Freud decía,  detrás de todo reproche hay un autoreproche. Si uno analiza, incluso superficialmente, el contenido de esa queja hacia el político, se dará  cuenta que tambien puede ser aplicada a la persona que enuncia. Hagan el ejercicio.
Muchos se quejan de que los políticos son corruptos y ellos mismos evaden impuestos o declaran menores ganancias que las que poseen.

Por otro lado, la queja tiene estructura histerica, y ya dicho esto vamos a diferenciarla del reclamo. El reclamo genuino, verdadero, y concreto no implica una pasividad del sujeto que lo enuncia y lo sostiene, mientras que la mera queja no sale de su propia posición de pasividad frente al problema enunciado.

El reclamo se asienta sobre la lógica del derecho y lo justo, mientras que la queja se edifica sobre la arbitrariedad individual, que a veces puede coincidir con las individualidades ajenas, pero en modo alguno crea organización social, es decir termina siendo un colectivo heterogeneo volatil como la queja misma, como fueron por ejemplo las marchas del 8N y otras similares.

La queja des-responsabiliza a su enunciador y pone el acento en el otro. Por eso es el prototipo de la histeria, cuya intervención freudiana en el caso Dora nos aparece como muy actual para nuestra sociedad y su queja hacia lo político:

"¿que tienes que ver tu en eso de lo que te quejas?"

Estadio del espejo, cuernos y narcisismo

Lo especular.
Es alli en donde los primeros esbozos de la identidad, del yo, empiezan a cristalizarse, a formarse, a travez no solo de la imagen reflejada en el espejo, sino a travez de la intervención del Otro, quien es el que le devuelve al sujeto la diferencia y las similitudes con la imagen virtual: "ese que ves allí en el espejo eres tú... pero tambien eres éste que está aquí y que podemos tocar".

Dialéctica por la cual todo el tiempo estamos reflejandonos en los demas, siendo estos otros quienes nos devuelven identidad.

Ahora bien, ¿cual es el drama de Narciso?... no tiene que ver con su muerte, ya que como nos enseña el psicoanalisis (principalmente el lacaniano), el componente explicitamente dramatico la mayoria de las veces cumple la función de solución de un drama mucho peor que es el implicito o estructural, oculto, y es por ello que la muerte de Narciso corresponde a una solución.
El drama estructural por decirlo de alguna manera, es la congelación,  la trampa imaginaria por la cual el joven no puede dejar de mirar su imagen reflejada en el rio... es esa trampa narcisista en la cual el sujeto queda atrapado sin posibilidad de dialectizar su identidad a travez de otras personas... es la trampa peligrosa de la imagen especular en donde no hay un Otro que marca la diferencia entre la imagen virtual y la imagen real.

Ahora bien, habiendo dicho esto, ¿que corno tiene que ver con el engaño?

Como muchos de uds. saben, a partir del auge del neocapitalismo a principios de los 90, la importancia en los valores, el respeto, las instituciones, la ley, es decir en general,  el desvaído del gran Otro, han llevado a que nos relacionamos entre los humanos de una forma muy distinta a nuestros padres y abuelos. Antes la palabra y los valores, eran el eje regulador de las relaciones sociales, pero hoy lo son las mercancias, y dentro de ellas las imagenes, las cuales tienen un valor central en esta logica moderna de intercambio.
El engaño,  la infidelidad,  o la traición en general, ya no tiene que ver con los otros o el Otro, ahora en la modernidad, la mayoria de las veces tiene mas que ver con uno mismo. Antes la traición resultaba producto de un deseo a otra persona u objeto dentro del cual se habia consensuado como prohibido con la persona traicionada, pero ahora, en la actualidad, nos encontramos muchisimas veces no con ese modelo, sino con el drama de Narciso. La traición ya no tiene que ver con el deseo por lo tercero, sino por reforzar la autoestima, el narcisismo, o simplemente para hacer mas bella la imagen en el río en la cual uno se regocija. Aqui nuevamente, la trampa imaginaria narcisista, por la cual los sujetos ya no ven ni reconocen al Otro, ni a su amor, y ni siquiera a su deseo.

Ahí estan, contemplando su imagen, repitiendo su ritual... anhelando que alguien los empuje al río.



Nota: disculpas por el formato de redacción,  la mayoria de las veces posteó desde el celular.